Prefacio al libro editado por Castelvecchi Edizioni, Roma 1997.

Dejad que los niños.
Pedofilia: pretexto para la caza de brujas

Luther Blissett

 

Los niños de un coro francés iban a realizar un viaje navideño a Bélgica, pero el viaje fue cancelado porque padres y maestros consideraron que Bélgica era "un país peligroso para los niños." Así que se encerrarán con ellos en casa, los niños cantarán 'Navidades Blancas' para mamá y papá y el cerrojo de la puerta les protegerá del perverso mundo exterior. Todavía quedan historias para no dormir (reales) que se pueden contar bajo el árbol navideño en una noche occidental. Aquí podemos ver el prejuicio y la cobardía transformarse en idiotez total. Esta sociedad ha estado libre de tragedias colectivas reales desde hace mucho tiempo (guerras, plagas, revoluciones, represión, hambre), y ahora inventa un País Malo, i.e. Bélgica, para cubrirlo con la paranoia y dar rienda suelta a una cobardía blindada. Se infunde a un grupo de niños inconscientes la estupidez de los adultos adictos a los medios. A menudo invoco la terrible, implacable frase que escuchaba murmurar a los mayores: "Toda segunda generación necesita una guerra." Posiblemente ésta es la única manera de expresar el miedo real y el dolor de la absurda pesadilla de una sociedad decadente.

Michele Serra, L'Unita, 24 de diciembre de 1996.

Hay dos problemas. El primero es el de la violación real, del que las mujeres y - más específicamente - las feministas se han ocupado perfectamente. El segundo es el de las reacciones de la opinión pública. En este nivel se producen efectos secundarios tales como la persecución y la movilización moral.

Guy Hockkenghem, en el programa de radio Diálogos, France-Culture, 4 abril de 1978

Uno de las mayores campañas de represión que se hayan visto - una caza de brujas que nos devuelve a Salem 1692 - ocurre ante nuestros ojos. Se inspira, al menos eso parece, en la más noble de las 'buenas intenciones' - por tanto indiscutible, por tanto aparentemente 'natural': proteger a nuestros niños. Protegerlos de los 'monstruos', de las conspiraciones de la Internacional Pedófila, del Diablo, la violencia en TV, los ordenadores... Impedir que su *inocencia* sea profanada por la vida y la sexualidad. Su inocencia, sin embargo, es sólo un engaño ideológico que se han inventado las autoridades adultas (padres, sacerdotes, maestros, psicólogos, políticos).

En este libro aconsejo desconfiar de todos los que enarbolan el infierno para proteger a los niños, porque obstryen el camino de una real, necesaria "liberación de no-adultos". Trato de argumentar acerca del linchamiento moral, la homofobia, la intolerancia, el odio por las pretendidas 'perversiones', 'monstruos' de portada y cualquier otra caracterización de la 'caza del pedófilo' que golpea en muchos países (Italia incluso) e Internet.

El niño ha llegado a ser el único y exclusivo candidato al papel de Perfecta Víctima. Cualquier teoría de la conspiración acerca de los cocos que molestan a los niños está inexorablemente condenada al éxito. ¿Hay alguien que no apruebe un buen verdugo cristiano cuando se trata de (alegadas) violaciones de niños? Abrogación extraoficial de la Presunción de Inocencia, detención indefinida, censura de los medios, archivos electrónicos de 'pedófilos', castración química... Nada les parece probablemente excesivo a estos caciques bonachones, cruzados luchando contra las sombras.

Recientemente, hemos visto incluso a Batman acabar con una banda de 'pedófilos'. Esto es interesante: según Bryan Talbot, las aventuras del 'Caballero Oscuro' son imaginarias, sólo ocurren en la cabeza de Bruce Wayne. Wayne sufre síndrome de disociación histérica. En una historia del Batman subversivo de Talbot titulada "Máscaras", un psiquiatra dice a Wayne: 'Su acoplamiento a la identidad de "Batman" es un recurso para regular su mundo[...] Para usted el mundo es demasiado caótico y necesita IMPONER un orden en él. Es un impulso FASCISTA típico, muchas personas lo sufren. Sin embargo, en cuanto lleva una máscara, allí emerge su segunda personalidad. POTENTE. PODEROSA. Capaz de ENFRENTAR cualquier problema. Pero, desgraciadamente, ha ido demasiado lejos. Usted se ha cosido a sí mismo una MITOLOGIA totalitaria, una neurosis alucinatoria profundamente arraigada.' Considero esta neurosis similar a la que aflige a quienes ven 'pedófilos' por todas partes. El 'pedófilo' - como el Judío para quienes creen en la Conspiración Judaica Mundial o el antisemita para quienes sirven en al bando opuesto - representa todo lo que hace que el mundo sea un confuso enredo. El 'pedófilo' - tanto como su horror gemelo, el 'satanista' - es perfecto para cumplir el papel de asesino espectacular, y por tanto es él la "víctima real", a quien todos quieren apedrear hasta la muerte, la víctima propiciatoria de una sociedad que - a pesar de estar invadida por el voyeurismo, porno-estimulada y sex-mediatizada, continúa más y más frustrada, tristemente caliente, sexasustada y monógama.

Después del entierro de la libertad

Ésta no es una antología de textos acerca de la 'pedofilia' y la represión. Mi método es el plagiarismo, amontonar material, cortar y mezclar textos preexistentes, hacer que las frases choquen una contra la otra, citar y re-escribir. No es tampoco un libro instantáneo. He investigado mucho tiempo la tendencia represiva que comenzó hace veinte años en la USA pre-digital, en paralelo al despliegue de Internet y al logro de esta Europa de Maastricht, no, esta Europa de Marcinelle, donde esto experimenta mutaciones letales que van más allá. Desgraciadamente este libro no va estar anticuado, porque las cazas de la bruja están siempre de moda.

No era fácil escribir el libro: después de todo, ¿cuál es el objetivo de un ensayo en un asunto tan polémico, escrito desde un punto de vista impopular por un portador de un nombre múltiple anónimo[...]? ¿Debía suavizar los golpes, llevar mis puntos de vista al contexto de una discusión democrática para que los liberales - potenciales aliados en la lucha contra la nueva Inquisición - no me rechazasen? ¿Qué podía hacer? Lo único de lo que estaba completamente seguro era de que la parte mejor de las personas interesadas en los mitos y hechos de Luther Blissett compartirían la mayoría, si no todas mis opiniones. Alguien que entiende las implicaciones de un nombre múltiple (una crítica radical de la Identidad) también sabe que la cultura dominante se construye sobre la contención anal y la negación de la sexualidad infantil. Así que no suavicé ningún golpe, los lectores (democráticos o subversivos) sabrán como tratar con esto, y tomar lo que les guste.

Por ejemplo:

[En Bélgica] el capital se re-estructura a sí mismo con una operación similar a nuestra Comisión Manos Limpias, con la histeria antipedófila en lugar del soborno. Yo despreciaba a esas chusmas de linchamiento no declaradas, fetichistas de las esposas, pavimentando el camino para la advención de un nuevo Führer. Despreciaba la cortedad de miras de esos proletarios disfrutando del show de nuestros poderes-reestructurándose-a-sí-mismos para joder a la clase trabajadora más duro y mejor. Ahora no puedo sino despreciar las procesiones de antorchas de las familias de Flemish y Walloon, y los obreros yendo a la huelga ¡para expresar su solidaridad a un juicio! La "pedofilia" de Marc Dutroux y sus influyentes compinches (que no es realmente tal, sino violación y asesinato) es sólo un espectáculo divertido, como lo era el "terrorismo" hace veinte años.

Luther Blissett, 'Non giocatevi la testa col Diavolo', Zero in condotta, 8 de noviembre de 1996, p.25.

Cuando lo escribí, no sabía qué podía dar por supuesto: después de dos décadas de contra-revolución sexual y cultural impuesta por los sacerdotes de la adoración del trabajo, el culto al amor familiar (incluidos los sociólogos, psicólogos y filósofos sin ideas, los tecnócratas del SIDA, las corrientes reaccionarias del movimiento feminista etc.), la crítica radical está forzada a repetir el alfabeto acerca de la censura, la homosexualidad, la transexualidad, la sexualidad de los niños y las relaciones no monógamas. Como atención a las generaciones más jóvenes, crecidas durante y después del 'backwash,' podemos repetir lo que Karl Marx escribió acerca de las personas alemanas en la Contribución a una crítica de la filosofía del derecho de Hegel:"Hemos compartido las reformas de las naciones modernas sin haber compartido nunca sus revoluciones. Si hemos reformado, ha sido en primer lugar porque otras naciones se atrevieron a hacer revoluciones, y en segundo lugar porque otras naciones sufrieron contra-revoluciones - por una parte, porque nuestros dueños estaban asustados, y por otra porque no se asustaron. Con nuestros pastores al frente, nosotros sólo hemos acompañado a la libertad en el día de su entierro." Así estamos de vuelta a lo fundamental, esto es el día después del entierro.

El único aspecto que no necesita llevarse de nuevo a cabo es el fin de la familia. Quiero decir, sé que esta institución (basada en la castración mutua, la autoridad y la esclavitud sexual legal) todavía existe y es el tema principal de los debates mediáticos y parlamentarios. Esto aburre y deprime. Y además la inexorable, liberada, explosión "anti-económica" de la familia está bajo la mirada de alguien. El destino de la familia depende del destino del trabajo asalariado. Debido a la declinación de la sociedad de pleno empleo, los miembros de familias nucleares se están volviendo locos, y esto es especialmente cierto para esas familias que cuentan sólo con un ingreso. Padres, madres y niños no pueden mantener más tiempo una cohabitación forzada, y están a punto de matarse uno al otro, romperles la cara a los demás con una barra de hierro, dispararse o estrangularse, o de sacarse los ojos por razones aparentemente fútiles. La familia nuclear muere, literalmente. Si nosotros logramos canalizar esta violencia (que está estrictamente relacionada con la proletarización de las clases medias) y volverla contra aquellos poderes que son responsables de nuestra miseria - material, humana, sexual-, llegaría a ser posible un género nuevo de liberación.

Por supuesto, no será factible ninguna Segunda Revolución Sexual sin una reducción drástica de las horas de trabajo, y la reducción de la "producción" (que no es sino la destrucción del ecosistema) y el "consumo" (que no es nada más que gasto). Ecología Social. ¡No trabajes, haz el amor!

Este es lo que pienso de "el pilar de todas de todas las virtudes," la moral cristiana y la sociedad capitalista. Estas opiniones no están hoy de moda.

¿Diminutio Auctoris?

Uno no puede emerger más que una vez del mismo agujero negro. Bajo el cielo no hay tiempo para una 'contra-investigación completa'. Este libro no pretende ser exhaustivo. Es sólo una reescritura de las notas que tomé cuando estudiaba qué contempla la sociedad burguesa como el Otro Lugar Absoluto. La vastedad del asunto me recuerda la del Infinito, verdaderamente, la del Aleph, siempre había una conexión más, hata que el ruido llegó a ser dañino y el viento de la infamia hirió mis orejas, entonces mis sienes comenzaron a palpitar, el tema llegó a ser una obsesión y no podía protegerme un poco de mi frialda perdida... hice lo que me pareció mejor, remontar nadando el río de la indignación. Una lucha desigual, un hombre contra todo, como en un reggae clásico de los 70 que se inspira en un spaghetti western[...].